Climas en España
Vamos a hablar de los diferentes climas que hay en España, cómo son y dónde se localizan. Para cada clima y subclima explicaremos su área de influencia y sus rasgos distintivos en relación con los componentes básicos del clima: las Temperaturas (promedios anuales y mensuales, variación térmica) y las Precipitaciones (cantidad anual, distribución mensual y presencia o ausencia de meses según el criterio de Gaussen). Estos rasgos están determinados por los factores que influyen en la diversidad de los componentes del clima.
Y si quieres practicar tu nivel en este tema, en la parte inferior tienes preguntas test para evaluarte.
Factores geográficos del Clima
Entre éstos destacan la latitud, el relieve, la influencia del mar y la posición.
- Según la latitud, España está en la zona templada del planeta, con influencias de la zona polar (al norte) y subtropical (al sur). Esto provoca que en Península y Baleares existan estaciones climáticas marcadas, lo que no pasa en Canarias por su posición más al sur, y que las temperaturas y precipitaciones cambien de norte a sur.
- El relieve español es muy irregular, afectando mucho a las características climáticas españolas. En promedio, por cada 100 metros de subida en altitud la temperatura baja 0’6 ºC y las precipitaciones crecen por el efecto foehn. El relieve también tiene que ver con las vertientes según el viento (barlovento y sotavento) y el sol (solanas y umbrías).
- La influencia marítima es relevante porque modera las temperaturas, reduciendo la variación térmica. La forma compacta de la Península Ibérica y la situación periférica de gran parte de sus cordilleras restringe mucho la influencia marítima, haciendo que el interior peninsular tenga una gran continentalidad.
- La posición de España entre el continente europeo y africano, el Océano Atlántico y el Mar Mediterráneo hace que reciba influencias muy variadas de todos ellos.
Factores termodinámicos del Clima
Destacan los centros de acción, las masa de aire, los frentes y la circulación en altura.
- Los centros de acción. Según la presión atmosférica, hay zonas de alta presión o Anticiclones, y zonas de baja presión o Borrascas, que tienen un origen dinámico o térmico y se muestran en los mapas de isobaras. Los principales centros de acción que afectan a España son:
- Los anticiclones de las Azores, Escandinavo, Invernal Centroeuropeo e Invernal Peninsular.
- Las zonas de baja presión de Islandia, del Golfo de Génova, la Estival del Norte de África y la Estival de la Península.
- Las masas de aire, España, por su situación, recibe la influencia de masas de aire muy variadas tanto por su latitud (árticas, polares y tropicales) como por la superficie sobre la que se forman (marítimas y continentales).
- Los frentes, estos pueden ser cálidos, fríos u ocluidos, afectando a España principalmente los frentes vinculados al frente polar, es decir, a la separación existente entre las masas de aire polares y tropicales, especialmente en invierno y las estaciones equinocciales.
- La circulación en altura está determinada por la corriente en chorro o jet stream, que es la que indica la posición latitudinal del frente polar. La corriente en chorro se mueve hacia el norte en verano, lo que hace que España se vea más influenciada por las masas de aire tropical, y hacia el sur en invierno, lo que hace que se vea más influenciada por las masas de aire polar. Además, en ciertas épocas se suelen producir disminuciones de velocidad en la corriente, lo que hace que esta varíe y produzca vaguadas, es decir, bolsas de aire frío muy al sur y de aire cálido muy al norte. Los primeros son los causantes del fenómeno de gota fría, al coincidir el aire en altura con una temperatura cálida y una alta humedad en superficie en los litorales mediterráneos al final del verano y al inicio del otoño.
Elementos del clima
Los principales son: insolación-nubosidad, temperaturas, humedad, precipitaciones, presión atmosférica, vientos y evapotranspiración-aridez.
- Entre la insolación y la nubosidad hay una relación inversa. El sureste de España y las islas Canarias tienen más insolación porque están protegidos de los vientos dominantes y porque suelen tener condiciones anticiclónicas subtropicales. En cambio, el noroeste de la Península y la Cornisa Cantábrica tienen más nubosidad y menos insolación porque reciben los vientos dominantes. Por lo general, la insolación es más baja en el norte que en el sur, debido a que el norte está más expuesto a las alteraciones del frente polar, mientras que el sur está más influenciado por las altas presiones subtropicales.
- Respecto a las temperaturas, España se encuentra en el ámbito templado, salvo Canarias, que es subtropical, por lo que no hay grandes extremos térmicos. La temperatura media anual depende de la latitud (las medias son más bajas de sur a norte) y de la altitud, como se ha señalado. Este último aspecto es importante en la Península por su relieve accidentado. La amplitud térmica es la diferencia entre la temperatura media del mes más cálido y la del mes más frío y varía según la proximidad al mar, ya que el agua suele moderarla. En España, la posición periférica de las montañas hace que la amplitud térmica sea muy alta en el interior peninsular y que el efecto marítimo se reduzca a zonas costeras pequeñas o a valles abiertos al mar como el del Guadalquivir. Por eso, en el interior es común que haya olas de calor en verano y heladas en invierno.
- La humedad está relacionada con las lluvias, la cercanía al mar y la cantidad de sol y nubes, lo que hace que sea más baja en la Península de noroeste a sureste y también en las islas Canarias. En el interior peninsular, cuando hay anticiclón térmico en invierno, es común que haya nieblas, que pueden ser por advección o por irradiación.
- Las lluvias o precipitaciones en la Península Ibérica son más escasas de norte a sur y de oeste a este porque los vientos dominantes vienen del norte, noroeste y oeste y porque el norte está más afectado por las alteraciones del frente polar. En las islas Canarias las lluvias son bajas porque están en la zona de los anticiclones subtropicales, sobresaliendo las lluvias orográficas asociadas a los vientos alisios.
- La presión atmosférica se divide en zonas de alta presión, o Anticiclones, que tienen movimientos descendentes del aire, que dan estabilidad, y que son más frecuentes en la Península en verano e invierno; y zonas de bajas presiones, o Borrascas, que tienen movimientos ascendentes del aire, que producen nubes y lluvias, y que son más frecuentes en la Península en otoño y primavera.
- Los vientos más habituales en la Península Ibérica son los del Oeste, pero también hay muchos del norte y noroeste. En Levante hay muchos vientos del este y en Canarias los alisios. Los vientos influyen en la distribución de lluvias y temperaturas. Por ejemplo, las zonas a barlovento tienen más lluvias que las de sotavento y la dirección principal del oeste y noroeste y norte hace que las lluvias en la Península sean menores de oeste a este y de norte a sur.
- Evapotranspiración-aridez. En cuanto a las temperaturas, los vientos dominantes hacen que la Submeseta Sur sea la zona con más amplitud térmica de España, porque está más lejos del mar. La evapotranspiración es la pérdida de humedad de las masas de agua, de la superficie terrestre y de los seres vivos, que aumenta con las temperaturas altas. Cuando la evapotranspiración es muy alta puede causar aridez. En la Península las zonas de clima mediterráneo tienen una gran aridez en verano, y los meses secos se alargan en las zonas de clima mediterráneo árido. Lo mismo pasa con el clima subtropical de Canarias.
Los tipos de clima en España
Cima Oceánico o Atlántico
Se trata de un clima templado, con unas temperaturas suaves, una amplitud térmica baja, una nubosidad y humedad altas, y unas lluvias copiosas y regulares. En la Península Ibérica abarca una franja continua desde Galicia hasta el Prepirineo catalán. Esta ubicación se debe a su situación septentrional, lo que hace que esté afectada casi todo el año por las borrascas del frente polar. Además, su posición a barlovento de los vientos del Atlántico hace que el mar regule las temperaturas, al igual que las lluvias orográficas. Dentro de este clima se pueden diferenciar dos subtipos: el oceánico puro y el de transición.
- Clima Oceánico puro o marítimo. Ocupa las zonas más cercanas a la costa desde Pontevedra hasta el oeste de Navarra. Tiene unas temperaturas moderadas durante todo el año, con una temperatura media anual (TMA) de 11 a 15ºC, con veranos breves y frescos (con temperatura media mensual de menos de 22ºC) e inviernos templados y suaves (con medias mensuales de 6 a 10ºC). Por eso, la amplitud térmica (AT) es baja, de unos 10-12ºC. Las lluvias son altas, normalmente más de 1.000 mm anuales, y muy regulares, sin ningún mes seco según el criterio de Gaussen, aunque en los meses de verano hay menos lluvias.
- Clima Oceánico de transición o de interior. Está en las zonas de interior lejos de la costa, desde el interior de Orense hasta el Prepirineo catalán. Por eso, el mar influye menos, y las temperaturas son más extremas (con veranos más calurosos e inviernos más fríos) y la amplitud térmica más alta, con valores de 12 a 15ºC. Su posición a sotavento de los vientos dominantes hace que las lluvias sean menores, entre 700 y 1.000 mm, y que haya uno o dos meses secos.
Clima Mediterráneo
Se trata de un clima templado que en España abarca la mayor parte del territorio, cubriendo toda la Península salvo las zonas de clima oceánico y de montaña, las Islas Baleares, Ceuta y Melilla. Su característica principal es la poca e irregular lluvia, con valores anuales de entre 300 y 750 mm y una gran sequedad en verano. Este clima depende de la circulación general atmosférica, ya que en verano la zona está bajo el dominio de los anticiclones subtropicales, mientras que en invierno, otoño y primavera está bajo la influencia de las bajas presiones y frentes polares. Las temperaturas varían mucho según la influencia marítima y la posición latitudinal, factores que también afectan a las lluvias, lo que hace que haya varios subtipos: marítimo, continentalizado y árido.
- Clima mediterráneo marítimo. Está en las costas del este y sur de la Península Ibérica, Islas Baleares, Ceuta y Melilla, y también afecta a la parte baja de la depresión del Guadalquivir. Tiene unas temperaturas moderadas en invierno y calientes en verano, con una AT media de entre 12 y 15ºC. La TMA, que está por encima de 15ºC sube de norte a sur. Las lluvias son muy irregulares, con varios meses secos según el criterio de Gaussen, y tienen valores de entre 750 y 300 mm anuales, que bajan de norte a sur y de oeste a este. También son muy fuertes, sobre todo en otoño por el fenómeno de gota fría, provocando avenidas e inundaciones, sobre todo en el área levantina.
- Clima mediterráneo continentalizado o de interior. Está en todo el interior peninsular (Meseta, depresión del Ebro y zona alta de la del Guadalquivir), salvo las zonas de montaña. La Península es maciza y las montañas están en la periferia, lo que hace que esta zona esté lejos de la influencia marítima y a sotavento de los vientos. Por eso, este clima tiene una AT alta, de más de 16ºC y hasta 20ºC. Las lluvias son parecidas al mediterráneo marítimo, con una sequedad evidente en verano, pero los máximos de lluvia se dan más en primavera y otoño, cuando las borrascas del Atlántico pasan por el interior peninsular.
- Clima mediterráneo árido. Está en el sureste de la Península, desde el sur de Alicante hasta Almería y parte de la costa granadina. Está a sotavento de los aires atlánticos, por lo que la sequedad es muy fuerte, con 9 o más meses secos según el criterio de Gaussen, y las lluvias muy escasas, menos de 300 mm anuales, y además muy fuertes, ligadas muchas veces al fenómeno de gota fría. Las temperaturas son parecidas al mediterráneo marítimo, con inviernos moderados, veranos largos y calientes y una AT baja.
Clima Canario o subtropical
Las islas Canarias tienen este clima y sus rasgos dependen de la latitud subtropical (predominan los anticiclones subtropicales, por lo que hay estabilidad atmosférica y vientos del norte o alisios), su situación en el océano atlántico (mar abierto y frío, más todavía por la corriente fría de canarias, lo que refuerza la estabilidad atmosférica), la cercanía al continente africano (por lo que a menudo llegan masas de aire sahariano que causan olas de calor y calima) y su relieve (en las islas más altas la altura baja las temperaturas y sube las lluvias en las fachadas de barlovento). Por todo esto, el clima canario tiene unas temperaturas altas todo el año (TMA entre 19-21ºC) y una AT baja (entre 7 y 8ºC). Las lluvias son muy pocas e irregulares, variando entre los 100 mm de las islas del este a los poco más de 300 mm de las del oeste. De todas formas, en las islas más altas en las fachadas de barlovento las lluvias son más altas, muchas veces por el fenómeno del mar de nubes.
Clima de montaña
Las temperaturas son más bajas por la altura y, por eso, las lluvias son más altas en las fachadas de barlovento y más bajas en las de sotavento por el efecto foehn. En las zonas de montaña, como los Pirineos, Cordillera Cantábrica, Sistema Central y Cordilleras Béticas hay el mismo clima que en las zonas de alrededor, ya sea oceánico o mediterráneo, pero con unas temperaturas y lluvias diferentes por la altitud.
Climas locales
Los factores geográficos o humanos pueden cambiar mucho las condiciones generales de un clima, creando los climas locales. Como ejemplo de los factores geográficos, en las zonas de umbría y barlovento de las Cordilleras Subbéticas, como la Sierra de Segura, las temperaturas bajan y las lluvias suben, creando unas características climáticas parecidas a las del clima oceánico, lo que hace que haya especies como el roble y el acebo. En cuanto a los factores humanos, el clima urbano se distingue por un aumento de las temperaturas por el asfalto, las construcciones, las calefacciones y el tráfico, y este aumento de las temperaturas hace que el aire suba y la contaminación hace que el agua se condense al usar como anclaje las partículas contaminantes, lo que hace que haya más lluvias y nieblas.
Los factores geográficos hacen que el clima en España sea muy diverso, lo que se refleja en una vegetación y unos usos agrarios también muy distintos.
Ejercicio y preguntas test sobre el Clima en España
1. ¿Cuál de las siguientes características corresponde al clima mediterráneo típico de gran parte de España?
a) Precipitaciones abundantes todo el año
b) Veranos fríos e inviernos suaves
c) Veranos calurosos y secos, e inviernos suaves y algo lluviosos
d) Temperaturas bajas y nieve frecuente en invierno
2. ¿Qué factor influye notablemente en el clima de la costa gallega?
a) La altitud de la meseta central.
b) La corriente cálida del Golfo
c) La proximidad al Mediterráneo
d) Los vientos del Sahara
3. El clima subtropical, característico de las Islas Canarias, se caracteriza por:
a) Veranos largos y extremadamente calurosos
b) Precipitaciones abundantes durante todo el año
c) Temperaturas suaves todo el año y escasas precipitaciones
d) Inviernos muy fríos y nevados
4. ¿Qué tipo de clima predomina en la meseta central de España?
a) Clima oceánico
b) Clima continentalizado
c) Clima subtropical
d) Clima mediterráneo
5. ¿Cuál es una característica distintiva del clima oceánico presente en el norte de España?
a) Escasas precipitaciones durante todo el año
b) Veranos muy calurosos y secos
c) Inviernos suaves y veranos frescos con precipitaciones abundantes
d) Temperaturas elevadas todo el año
Puedes ver más contenidos y apuntes gratuitos en nuestra página.
Resultados correctos del test: 1c, 2b, 3c, 4b, 5c